jueves, 16 de febrero de 2012

CERRADO POR REFORMAS







 La suerte me persigue. Así de claro. En algo agradezco al altísimo no estar, de momento, en edad de merecer.  Me cierran el local cercano por la cosa esa de la reformación laboral. La que alguien ha proclamado a bombo y platillo  con  decreto ley  a todo meter de por medio,  que se sepa.
Albricias:  Ya tenemos reforma laboral.   Y  ahora ya estamos con  que si habrá recurso al procedimiento o si,   no habiéndolo, nos quedaremos mudos del asombroso poderío parlamentario, tan a la medida de 'migobiernoque no- es -mío- pero que - megobierna'. (La suerte me sigue de cerca)
Reforma laboral sí, reforma laboral no, de momento hasta que se disuelva el chapapote del otro mister Urdangarín,  ya  se está sembrando de vítores y salvas los medios afines, y de berridos de protesta y crujir de dientes las arenas movedizas del griterío disconforme.
La cuestión es así de simple, observen:  'Que será incapaz por sí sola de generar empleo'.  Eso razonan sesudamente quienes la han impulsado y promovido. Que a los señores de la patronal y a los de allá, carra Berlín, como dicen por mi pueblo, les ha encantado. Que está por ver si ¡hala, todos a la huelga general!, para darle en las narices al mi señor Rajoy , que parece se la huele.
Aquí estamos, a la expectativa de las ordenanzas de Cándido y de Ignacio. O sea, que sin entrar al trapo o como toricos de mihura  antes de lo que los perjudicados  marquen como pauta a seguir.
Hasta en esa nimiedad, que sería  una huelga de nada, a juicio de un mandamás de la desgobernación, nos ha entrado la parálisis vocacional. ¿Quién osará y con qué contrapeso económico secundar un frenazo absoluto?  Pocos o muy pocos. Los indóciles, como mucho. Las circunstancias mediáticas tampoco generan movilizaciones, ni agilizan la conciencia reivindicativa, últimamente maltrecha. Hecha añicos casi-
De tal modo que  si en tiempos gloriosos de Felipismo no había nada que temer, ni se interponían horizontes lejanos con una huelga   imponente, los de hoy son tiempo de silencio. Y tiempo de miedo y tiempo de canguelo. Por todo horizonte, el dogal al cuello de lo que nos va descifrando Europa, la  muy entrañable y compacta.
Para rato tenemos, viéndolas pasar,  el cada vez mayor desfase salarial,  mayor estancamiento  si no el hundimiento  de buena parte de la clase trabajadora.
A alguien  a quien no acierto a desenmascarar  sin más pistas le placerá .
Con suerte, servidora no será , lo juro.
Hoy más que nunca 'a callar', o 'por qué no te callas'...












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miércoles, 8 de febrero de 2012

ANGÉLICOS SILVESTRES




Tontamente  dentro de un 'itemisaest' habrán transcurrido los preceptivos cien días de gracia  para el desacomplejado gobierno. Aquel mi señor no es mío, don Mariano en confianza, está al cabo de la  calle  de todas y cada una de las flaquezas de sus directos subordinados mandarines de alguna Comunidad por ahí diseminada.
El coraje y el rigor que tanto gustan al señor Rajoy para dar carpetazo al déficit, los aplicará sin que le tiemble la mano al  rara avis señor Fabra, al cual, misterios del azar, siempre le agracia la Lotería, pongamos por caso. Ya le agraciaron, y cómo, los Bancos, concediéndole suculentos préstamos  amortizables en un razonable tiempo record: ¡A lo 98 años del citado caballero Fabra! Como lo oyen.
Entre el CAM que quebró y evaporó unos seismil millones de euros.  El BANCO de VALENCIA, que también la pata quebró y millones evaporó. La, que ya resulta cansina , Trama GÜRTEL, distrayendo (¿así se dice, distraer?) milloncejos para eventos. La telaraña entramada BURGAL, en tierra alicantí, fi.  El agujerillo millonario que tapó el señor Rato y más y más menudencias que parecen no importar miaja al personal de a pie, no hay responsables.  No, que se sepa. Sí, que, insistamos, el señor Rajoy conoce al dedillo,  no en vano es Registrador  de la Propiedad. O lo era, antes de la cosa.
Pues en ello andamos y aunque arrieros no somos, en el camino nos veremos:  Manos a la obra, con tesón y denuedo para que los dineros todos  hasta el (pen)último céntimo  sean devueltos y dejen de ser por siempre paganos los trabajadores por cuenta ajena, los pensionistas, los estudiantes, los investigadores del ministerio, los alumnos de Infantil y Primaria, las farmacias, las librerías y las cacharrerías. Las oenesgés y las simplemente ignorantes de la Segunda-Tercera-Definitiva Edad, ya multitud europeísta.
Y todos en lontananza solo apreciemos apabullados  el valor de los silvestres angélicos. Hoy, lo único que tenemos contante y sonante en el Hemiciclo. Las primeras veleidades  ya empiezan a despuntar  con los  Monto-ro, los De Guindos, los Cañete, los Gallardón  y sus macroideas.
Mañana, otro tablón de Avisos. Algunos, de echarse a temblar. ¿Es  verdá o es mentira?, que decía una paisana innombrable. Eso mismo.

















jueves, 2 de febrero de 2012

NO SABÍA PERO IGUAL DA




La cacareada sentencia del señor don Paco ha servido, que se sepa, al menos para tres  cosas.
a) Para poner sobre el tapete el sentido ético de algunos, unos, pocos, bastantes, bastantas dirigentes/as de la cosa esa  PPolítica.
b) Para reponer, ¡por fin! la honorabilidad al tándem Camps-Costa!
c)Para aclararle, en caso de que se deje aclarar, a doña Cos-pedal, que los des-presuntos implicados nada tienen que ver con la corrupción, el desorden moral y la desfachatez rayana a lo rocambolesco del asunto traje sí, traje no, sastre me regala, sastre no me presta,  pago sastre a tocateja, que p'a eso tengo perricas y tarjeta de crédito. ¡Toma ya!
Y sigue la historia  por todos ustedes conocida.
El jurado, lo que son las cosas,  popular,  decide por un voto que no se ha podido probar hubiera regalos.
Los acusados, eso mismo, felices como lombrices  quedan sumamente agradecidos, al estilo de  quinceañeros enamorados.
De cómo quedan las arcas públicas, y de la deriva del prestigio de la Justicia hacia el más bajo, imposible,
ya nos informarán  cumplidamente los ministros del ramo. O los portavoces, que para eso están.
Para dar minuciosa cuenta al público de los esperpentos denominados juicios.
Para jolglorio de unos, hazmerreir de otros y asombro de la mayoría, ahí se cierne como espadas  el caso Garzón,  salpicado de causas y  contracausas.
Lo que ayer pintaba  en oros, pinte hoy en bastos. Así son las cosas,  mi respetable don Baltasar. Los represaliados del franquismo  al  menos te dispensarán trato de favor. De otras mercedes, ni lo sueñes.  No toca.
 El frío siberiano, noticiable, ha deslucido los avisos de fulminación sucesiva e inmediata. A saber: Ley del aborto, ley de plazos  y  Dichosa Educación para la Ciudadanía. Doña Mato y don Wert dieron la pista  previa encuesta sobre el Paro en el mes de enero,  palabra de honor. 
Mientras salgo como puedo de esta parálisis polar, prefiero pensar en calma desde mi retiro biensonante.
A solas, a medio tango que me mira.
Creo que hago santamente. Total, de Tauste para el caso.





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