MI QUERIDA COMENTARISTA. IN MEMORIAM

'Decías ayer', solo hace horas que ya son recuerdo en el baúl de guardar.   Pero has optado por apagar el arrebato de tu palabra y nos quedamos, como bien ves,  huérfanos de tu presencia para siempre.
No estoy segura de cuáles eran tus intenciones,  así tan tempranas y  fuera de consulta. Sin un mal orden del día previsto para el acta final.
No nos dijiste, querida Angelita, que querías ahorrarnos el disgusto del adiós que seguro nadie iba a creer.
Y medio al abrigo de la playa del Sardinero, con la arena tibia del invierno, nos dejas el resultado de tu despedida. Y el silencio a carta cabal. Denso como nuestra pena.
Nos has reservado hasta el derecho de réplica.  Así eras de previsora. Siempre  con tu impronta de estar en los mínimos detalles.
Por fuerza no tendremos qué más decir: Te lo llevaste todo,  con tu sello y tus  nombres.
Déjanos llorar, ahora faltos de tus risas.

EL BUQUE Y LA INSIGNIA

'Tres-A': Tocado
"Cuatro A": Tocado.
Y sigue la cuadrícula bajo mano. Que no la vea ni sienta el profe vigilante de Aula.
"Uno B": ¡Hundido!
A las pobres gentes del crucero ni  les pasaba por la mente el trágico final mientras tomaban felices su última cena a bordo. Luego fuese el silencio y el negror de la noche alternando  la deslabazada evacuación, con el capitán, dicen las malas lenguas, a salvo en tierra.  El buque tocado. Más que escorado, a punto de hundirse a merced de las rocas en plena costa.
A capricho de la vida,  ergo muerte, se ha venido abajo el personaje que tan impunemente manejó tiempos y libertades de todos los españoles. Quien enmarcó con ribetes de autocracia  las "unidades de destino en lo universal"  ¡Sí, sí,  por definición!
Horas serán pocas para asimilar en justa medida, si de justicia y si mensurable, la larga fila de rendidos admiradores ante los restos del prócer.  Trasunto  a tiempo completo del arcaico franquismo y solo 'a tiempo parcial'   con la  mascarilla  de una democracia  de generosidad probada.
Ayer y  hoy  la sociedad,  sensible a las tragedias,  propias y ajenas,  dispuesta a rendir particular homenaje  merecido  a las víctimas del descalabro en aguas italianas.  Y la prensa a pleno rendimiento en sus páginas sin  escatimar  detalles  ni información, tan necesarios para que casi todo se sepa y/o se adivine.
Hoy  y mañana los  pro buque y  los pro  insignia prestos  a  tributar sus particulares adioses a quienes les pertenecieron  siquiera mediáticamente.
El buque, como fantasma en sábana blanca, escupiendo muertos, de eufemismo 'desaparecidos'.
Mi otra realidad in vitro, Don Manuel que fue,  regresando en serie  al TDT de cadena pública para exhibición y recordatorio de las capacidades y virtudes que lo adornaron.  No es arriesgado aventurar si otra estación , otra circunstancia habrán  disipado al férreo gallego, árbitro  de la graduada represión hasta bien entrados los setenta...
Aún truena en aguas de media noche el fragor del buque y los despavoridos pasajeros a la espera inútil de que un capitán reorganice el salvamento.
'Dos-F': Tocado.
'Dos-E': Hundido
'...Y la tristemente justificación  del ajusticiamiento de Julián Grimau.  Corrían los cincuenta y seis, si no me equivoco.
'...El  por entonces ministro Fraga  administraba  a capricho  la libertad de Prensa y ordenaba qué podía o no se podía decir en cada momento.
Hoy lo recubre y vela respetuosa  una muchedumbre ataviada de democracia que  -él-  ni gestó ni alumbró. Esos son los márgenes de error entre la Memoria y el Olvido. Ambas indisolubles cara y cruz. Ambas perversa única moneda.
Esas, las barreras infranqueables entre la dignidad de morir con méritos y el mérito de morir sin mácula. Y  sin honores, empero.
Para unos, insignias.
Para los otros, flores.
Para quiénes, solo ROSAS.
Para oídos atentos, el favor de  Händel y Bach resistentes a morir, en vida propia.

PENSARÉ, LUEGO NO SÉ SI EXISTIRÉ

Sí, señoras señores: Cada loco  con su monotema. El de servidora, porque me invade y me paraliza.   El  de los  recortadores,  porque es su oficio y les divierte horrores recortar, que el bien común  así lo demanda.   El de Obama, ¡pobrico!, con las manos atadas y Guantánamo  ahí  quieto a celebrar  otro aniversario infame. El de los señores del banquillo,   porque la realidad es terca y 'allegados son iguales, los más grandes  (bribones), medianos, y los chicos'.  El de, quiera dios si no lo quiere el diablo , Baltasar Garzón,  que algún día  verá iluminada  su impecable  trayectoria, sin banquillo entonces y recargo en la conciencia colectiva.
Sí,  en confidencia, de la noche a la mañana  tomo conciencia  de las  medidas primeras im-populares que me hacen temblar, ahogada  de por vida en el sector público y sin posibilidad de adherirme al  privado a ver si otra suerte me sonriera.
Sí,  las voces post -electorales  ahora me desayunan con  que la reducción drástica del déficit ha de  ser cargada a lomos de todo/a hombre de bien.  El solidario pagano de platos rotos.  Y tonto el que lo lea. Así  de categórico cuela el mensaje.
Sí,  parece natural que una pieza recortable  de necesidad  va a  ser  la Ciencia  que se  deberá conformar con 600 millones de euros menos. ¡Que inventen ellos, si quieren!
Sí, sí: No es extraño  que la  Alta Institución  Iglesia   disfrutará de exenciones fiscales, poco o nada de recortes y  al contrario  gozará de pingües subvenciones económicas a menos que se eche a la calle del silencio la turba aconfesional   para  clamar a voz en grito unos  impactantes  " hasta aquí hemos llegado".
¿Pero caerá esa breva?
Presiento que tras la noche vendrá la noche más larga.. Y no. 
Al alba, al alba.
Quedamos en buenas manos de Karl Ritcher.

'O POSICIÓN O REPOSICIÓN'

Reza el dicho popular: "Siempre hay un roto para un descosido",
Traspapelemos una miaja el mensaje,  ya de antiguo. Echemos un vistazo a la movida/ y /removida ministerial  y ¡oh sorprendente nombramiento que alucina!:  La señora Botella, (ex) primera dama otrora, alcanza por imprevista  vía de carambola concejil el puesto de mandataria de la Villa y Corte. ¡Toma ya!
Pobre mi Madrid castizo al punto.
Alguien versado en periodismo de pro osó hace escasas fechas expresar  las condolencias a  madrileños y amigos  por tan, a su juicio, alta calamidad política  acaecida  que  debererán soportar.
Que doña Ana esté a estas alturas todavía lucubrando  sobre aquella sinsorgada  'ley de Murphy ' sobre si la pera no da manzanas pero las manzanas dos a dos son como una pera y media pera',  es imperfectamente verosímil.
Que  su incuestionable curriculum culmina in extremis como auténtica dama del papel couché,  es manifiesta verdad. Al fin y a la postre le ha rentado más que suficiente navegar y bogar en la sombra (o luz) de don  JotaEmeAznarSenior, que nos presidió hace diez años de nada.
Lo expuesto no deja de ser meritorio:  A no toda fémina de bien le es dado ser fémina  gratia plena .
E ilustra el periodista de pro en lo más vulnerable:
"Botella, la gran maruja del poder popular" que dio rienda suelta a su afanosa  andadura política una vez inquilina  de facto en la Moncloa.
Y de ahí emana sin discusión  el quinto último poder, habida cuenta de los cuatro clásicos -poderes- aceptados comúnmente.
¿Alguna que otra acotación de interés a este, repitamos, insólito nombramiento?
Las que sugieran los sufridos, que no los bienpagados agraciados,  'pueblo madrileño' y el mismísimo señor Gallardón, sin vara o bastón a cambio de cartera ministerial. 
O acaso surjan  espontáneas cuando regresen por sus fueros jamás  desterrados las rancias tradiciones, las intrigas de corte, la burguesía caduca y desabrida, los denuestos a gays, lesbianas, rojos,  señores de la indigencia  procultural, los indignados que dónde fueron a parar,   ¡a saber!. Los   apegados al sillón del paro, eternamente paralíticos,  los okupantes sin casa y con mansión a media asta.
 Ya "Ana  Iª de España," con crucero, peineta y mantilla,  de coros angélicos  dominaciones, virtudes, potestades. Doña  Botella estática  e incombustible  ha prendido con fuerza  de ciclón la mecha del mandato. Biendicha por su gobierno, sublimada por la Iglesia.  Es  probable  no le falte aplauso de su connivente clá sumisa a la tranquilidad, orden y clasicismo de buenos modales, afín y sucedánea del dinero de contar y sonar.
Como también se aventura  no escaseen voces discordantes entre quienes no quedan cobijados bajo su  autoridad probadamente selectiva.
No tengo la suerte de pertenecer a estos grupúsculos   Hoy por hoy, tal como  recuerda la copla jotera,  'Me lo impide la arboleda'
Tal es mi Posición y Reposición. Tal el roto para el descosido.